El 2023 está atravesado por un furor rosa, mientras se populariza la tendencia Barbiecore
La película de Barbie promete ser uno de los estrenos más importantes del año. El primer live-action sobre la muñeca más famosa se lanzará el 20 de julio en los cines de todo el mundo, y presenta un diseño de producción con detalles que imitan el mundo de los juguetes en tamaño real y ponen al color rosa como protagonista total. Tanto así que hasta llegó a provocar consecuencias económicas: el faltante de pintura rosa a nivel mundial.
Parece que el rosa ya no es algo solo de “nenas”. El Barbiecore (es decir, la tendencia a usar solo el color rosa, imitando a la muñeca) volvió a estar presente en la moda en gran parte gracias a toda la campaña publicitaria de la película dirigida por Greta Gerwig, y es un reflejo del énfasis que pusieron los productores para crear este multiverso rosa.
Gerwig contrató a la diseñadora de producción Sarah Greenwood y a la decoradora Katie Spencer para diseñar la Barbie Dreamhouse, la casa de muñecas en la que vive la protagonista, en el estudio Warner Bros. Pictures a las afueras de Londres. En ese contexto, insistió en que todo el set tenía que ser rosa porque “mantener la ‘infantilidad’ era primordial” para poder desarrollar la trama.
Para eso, ambas se inspiraron en el modernismo de mediados de siglo de Palm Springs, incluida la Casa Kaufmann de Richard Neutra de 1946 y otros iconos fotografiados por Slim Aarons. “Todo lo relacionado con esa época daba en el clavo”, dice Greenwood, que se esforzó “por hacer real a Barbie a través de este mundo irreal”.